A cargo de Aldo Karagozian, Presidente de la Fundación pro Tejer

Si se abre la importación cientos de miles de trabajadores de la industria textil quedarán en la calle El presidente de la Fundación Pro Tejer, Aldo Karagozian advirtió durante el cierre de la Convención que si el Gobierno abre la importación textil “cientos de miles de trabajadores de la industria quedarán en la calle”, y reiteró la preocupación del sector por el aumento de la inflación minorista de la indumentaria. Denunció también que “resulta muy peligroso el comportamiento de algunos integrantes del canal comercial de la cadena de valor y del sector inmobiliario, que son una variable importantísima en el valor de nuestros productos”. “No se puede tapar el sol con las manos, la ropa está muy cara y todos tenemos una cuota de responsabilidad en ello”, reconoció el empresario. Durante su exposición Karagozian afirmó que los empresarios del sector “tienen la responsabilidad de entender el funcionamiento virtuoso de esta política económica exitosa, que ha devuelto la posibilidad de producir, invertir y generar empleo después de casi 30 años de destrucción de la industria nacional”. “Por su parte, al Gobierno no podemos dejar de plantearle cuáles van a ser las consecuencias frente a la amenaza de la baja de aranceles. No se si podrán bajar en alguna décima el índice de inflación, pero de lo que si estoy seguro es que cientos de miles de trabajadores de nuestra industria quedarán en la calle”, afirmó el empresario textil. Y agregó que el sector que representa tiene “en la inflación un enemigo común con la sociedad”. “Tenemos la obligación de defender el poder adquisitivo de nuestra población y nuestros empresarios. Esta historia la conocemos, sería un retroceso enorme. Sé muy bien lo que es despedir a cientos de colaboradores, suspender fábricas y bajarle los sueldos al resto de los empleados que tuvieron la suerte de mantener su puesto de trabajo”, aseveró el dirigente textil. En este sentido, afirmó que “el camino de una mayor apertura, sería un triunfo a lo Pirro”. Por otra parte, Karagozian destacó “el año pasado, en esta misma convención estimamos que en los próximos cinco años, el sector se comprometía a invertir 3.000 millones de pesos”. “Pero nos equivocamos, de seguir la actual tendencia, hoy podemos hablar de 4.000 millones”, proyectó el empresario. Asimismo, aclaró que esa inversión se realizará “únicamente en maquinas, puesta en marcha y edificios para albergar estas maquinas”. “A estos valores hay que agregar las inversiones en capacitación, software y hardware, publicidad, transporte, aperturas de locales comerciales, más el capital de trabajo necesario para poner en marcha las nuevas inversiones”, explicó el dirigente y aclaró que “todos estos muy difíciles de cuantificar, pero que suman otros miles de millones” de pesos. En cuanto a la situación actual de la industria textil, Karagozian explicó que “está trabajando con un alto uso de la capacidad instalada, con costos crecientes, con dificultad para trasladar estos aumentos de costos, y con un porcentaje de crecimiento de la importación que prácticamente dobla al de la demanda nacional”. Destacó además que el sector tiene la responsabilidad de que sus productos y sus marcas “trasciendan las fronteras de nuestro país”. Por ello instó a los empresarios a hacer “los esfuerzos necesarios para exportar nuestros bienes a nuevos mercados, participando en ferias internacionales y acompañando a nuestra Cancillería, en las misiones comerciales que esta organiza”. “La responsabilidad también implica la creación de más y mejor trabajo digno, para todo aquel que colabore para transformar nuestras materias primas en productos deseables para nuestro mercado, para los cientos de miles de turistas, y para los mercados externos que debemos conquistar”, manifestó el empresario. En cuanto a l trabajo informal, el dirigente textil estableció una diferencia entre trabajo en negro y trabajo esclavo. “El trabajo esclavo, por supuesto, que hay que condenarlo, denunciarlo y aplicarle a los responsables, las sanciones que le corresponden. Pero, es tanta la confusión, que se ha generalizado el concepto de trabajo esclavo, cuando en realidad, en la mayoría de los casos, se esta hablando de trabajo en negro”, explicó Karagozian. Pero advirtió que “nos debe espantar el trabajo esclavo en nuestro país y en cualquier otro en el que se lo practica”. “A veces cuesta entender cómo algunos se horrorizan con estos temas y proponen como solución que se importen prendas a precios, en muchos casos, apenas si se paga la materia prima. ¿Cuánto se imaginan que ganan esos trabajadores, cuántas horas trabajan, bajo qué condiciones, dónde duermen, cómo los tratan?”, se preguntó el empresario. Asimismo, aclaró que “el trabajo en negro, no es una condición particular de la industria textil, sino que forma parte de la realidad de nuestro país”. Para solucionarlo propuso que el Estado “incentive al empleador y al empleado para que estén dentro de la ley”. En este contexto, Karagozian afirmó que “este es el momento de que las empresas del sector asuman el liderazgo”. “Pro Tejer es hoy la nave que ejerce este liderazgo”, afirmó el titular de la entidad a la que calificó como “interlocutora en temas que se refieren a la industria textil y a los denominados sectores sensibles” ante el presidente Néstor Kirchner y los funcionarios del Gobierno. “El 10 nadie nos lo va a poner, el 10 nos lo tenemos que sacar. Y esto es verdad hoy más que nunca, frente a un Gobierno que explícitamente habla de reindustrializar nuestro país”, concluyó Karagozian ante más de mil empresarios y representantes del sector textil.